17 de enero de 2011

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Ella se levanta y, con la cabeza gacha, se va. Se dirige a un lugar donde sabe que nadie va a molestarla. Ella quiere paz. Busca alejarse de todo aquello que pueda herirla. Ella camina, busca con desesperación poder descansar. Es de noche. Ella observa la luna y el suelo. Se sienta a pensar, a equivocarse una vez más. Ella no puede huir. Es esclava de su propio cuerpo. Ella llora, llora y sufre. Mantiene esa costumbre. Ella acaricia sus propias manos, se abraza. Intenta ver el cielo, borroso desde sus húmedos y tristes ojos. Ella tararea una cansada melodía mientras sus pulmones se cierran. El miedo la abraza. Ella siente frío, está angustiada. Hay una última decisión. Ella se pone de pie, tiembla. Deja su mochila y nuevamente, se va. Ella no sabe en qué camino está, pero sabe en qué lo va a convertir. Desaparece en el horizonte, buscando un lugar donde pueda apagarse y dejarse caer. Ella lo va a lograr.


I'll come back when you call me. No need to say goodbye. 

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